quebrantapájaros (primera época)

CON LOS HUESOS POR EL AIRE

sábado, mayo 28, 2005

Juegos

Cuando era adolescente sabía jugar a cosas como estas. Me paraba al borde de la avenida más transitada de mi pueblo, cerraba los ojos y bajaba un pie a la calzada. Cuando apoyaba el segundo pie en el asfalto y sentía cómo a través de la fina piel de mis párpados se metían las luces de los autos, sus acabronados motores y chillar de neumáticos, pensaba: "un paso más y el fin. Sólo a un paso".

Hoy, como verán, el juego nunca fue terminado. A veces cruzo las calles sin mirar a los dos lados (cuando son de mano única), o paro la oreja para ver si viene una juki-delivery al palo, o me arriesgo alocadamente a andar en mi bici sin frenos. Ya no tengo tiempo para jugar ni para tomármelas en serio. Ya no.